Segunda Parte: ¡La fisioterapia no es una profesión, es una causa!

¡La fisioterapia no es una profesión, es una causa!

Hace unas semanas te platicamos sobre la trayectoria de Paco como fisioterapeuta en rehabilitación neurológica infantil, sin embargo dejamos lo retador para este artículo.

Como te comentamos en el artículo anterior, Paco labora dentro del Centro de Rehabilitación Infantil Teletón (CRIT) Veracruz, con sede en Poza Rica, pero el estar ahí no ha sido nada fácil, y Paco nos platica por qué…

¡No cualquiera puede ser fisioterapeuta!

Hoy me encuentro dentro de la clínica A, del CRIT Poza Rica, Veracruz, donde nos encargamos sobre todo de parálisis cerebral y lesiones cerebrales, disgenesias cerebrales, niños con trastornos del TDH, atendemos desde parálisis cerebral leve hasta severa, y obviamente entre ese rango hay muchas diferencias entre lo que va poder lograr un niño o no, y mucho de lo que les importa a los papás es saber si va a caminar o no…  a veces hay que aterrizarlos y eso es una parte dura, tanto para ellos el escuchar que su niño no va poder tener la capacidad de caminar, como para nosotros como fisioterapeutas de su hijo al tener que decir las condiciones reales de su niño… pero ¡Vaya! hay que trabajar con objetivos realistas.

Es muy difícil el perfil que debemos tener ante los padres, ante el niño que es mi paciente y nuestro propio sentir… existe una línea muy delgada entre lo que es éticamente correcto y lo que no, sin embargo con el contacto constante que tenemos con los pacientes, empezamos a generar un vínculo, y en muchos casos generamos una amistad, por lo que debemos saber delimitar para no involucrar amistad, sentimientos y trabajo… es una línea muy delgada que se puede sobrellevar teniendo seriedad y los pies en la tierra con este trabajo tan humanitario.

Una de las partes más difíciles a las que nos enfrentamos en el día a día es el compromiso de la familia con nuestro paciente, en este caso con su niño en rehabilitación neurológica, muchas veces o la gran mayoría de las veces, el hecho de involucrar a la familia, no solo en la terapia, movilizaciones, ejercicios y demás, sino involucrar al niño a las actividades de la familia, ya que ahí es cuando debemos invitar a que los niños sean una parte más activa socialmente, porque no es lo mismo los estímulos que reciben en terapia a todo lo que pueden encontrar fuera: los colores, los sonidos, los aromas, etc., todo eso, aunque no lo parezca sigue estimulando al niño y lo sigue ayudando en sus procesos de maduración.

Una cuestión que a mí me impactó muchísimo fue el caso de un paciente que tuve, un niño, que inclusive iba con casco como de taekwondo de foami, porque era muy autoagresivo, si se mordía la mano se arrancaba un pedazo, se pegaba con puño cerrado… mero en la cabeza, y fue así que cuando lo vi de momento dije “… dios, por que pasa esto…” , debo de aclarar que no soy una persona muy religiosa que digamos, pero vaya es que yo no podía creer que un niño esté sufriendo tanto, y pensaba “Wow.. Qué grande es la mamá que ha aguantado aproximadamente 8 años con su niño en esta situación, que ha buscado especialistas y demás y por más que ha buscado, no ha encontrado una forma de modificar y corregir esas conductas…”,  hay papás que también debería de ganarse un reconocimiento, fue algo tan impactante que al terminar ese día de trabajo no me podía sacar esas imágenes de cómo el niño se autoinfligia solo, fue algo muy difícil para mí.

También es importante decirte, que como fisioterapeuta no solo necesitamos ser fuertes, ser humanitarios, saber pintar de felicidad el día de nuestros pacientes, sino también, es indispensable estar preparados, actualizarnos todos los días, como lo mencione, la fisioterapia es una materia que igual que la medicina, se necesita estar preparado y saber en qué rama de la fisioterapia podemos contribuir más.

Como fisioterapeutas, nunca debemos parar de aprender, tenemos que descubrir la magia del aprendizaje continuo, y te voy explicar porque…

Cuando yo trabajaba en la UBR, teníamos un doctor en rehabilitación que hacía las valoraciones y asignaba los tratamientos, pero en la actualización que llevamos nosotros habíamos visto que eran obsoletos, que había mejores técnicas para los niños, y realmente ese reto nos cambia totalmente… inclusive una vez tomé un curso de electroterapia, me dieron una información y 5 años después volví a tomar ese curso con el mismo ponente y lo que me habían dicho en el primero cambió drásticamente con lo que estaban dando en este último, y al hacerle el comentario al ponente, me dijo algo que tiene razón, “…al final, esto sigue avanzando…”, ahí el hecho de no quedarnos con lo que tenemos, sino seguir buscando más.

El problema aquí, y que si deberíamos hacer como gremio, es que realmente la fisioterapia es un mundo, hay niños como los que vemos en el CRIT con problemas musculares, lesiones cerebrales, pero también hay un mundo de pacientes con problemas de columna, pacientes geriátricos, deportistas… entonces yo sí creo que también nos estamos enfrentando a una situación igual que en la medicina, a tratar de hacer especializaciones, yo si considero que la fisioterapia es un mundo, por ejemplo, actualmente como trabajo con niños, yo sé de valoraciones infantiles, pero cuando escucho valoraciones por ejemplo de cuello, me dicen valoración de Johnson… y me quedo con cara de duda, de no sé, por lo que realmente creo que se debería enfocar la fisioterapia en cambiar el paradigma, sí tenemos el conocimiento, actualmente podemos trabajar con una gran variedad de pacientes, pero sí creo que tanto conocimiento nos debe llevar a hacer especializaciones.

Me gustaría creer en algo épico a donde necesitarás tener experiencia aparte del conocimiento y de la teoría, ya que incluso a mí me ha pasado, no siempre lo que tienes en los libros tiene que ver con lo que ves en el campo de acción… por lo que trato de estar actualizado, sí importa el currículum, sí importa tomar cursos avalados por instituciones reconocidas, pero hay que hacer algo por cambiar la perspectiva de la fisioterapia, porque a veces, incluso de manera inconsciente, en lugar de mejorarla la estamos devaluando, por lo que debemos preocuparnos por ser mejores terapeutas y que el gremio no esté invadido de tanta intrusión, no hacer de la fisioterapia un negocio solo para uno, si para todas las partes.

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